Suscribete y recibe actualizaciones por Email

Ingresa tu correo aquí:

martes, 28 de marzo de 2017

FUNCIONAMIENTO DE LA MEMORIA, VARIABLES QUE AFECTAN LA RETENCIÓN

La memoria humana, como la memoria de un ordenador, permite que almacenemos la información para utilizarla después. Para hacer esto, sin embargo, el ordenador y nosotros necesitamos dominar tres procesos implicados en la memoria. El primero se llama codificación; es el proceso que utilizamos para transformar la información de modo que pueda ser almacenada. Para un ordenador esto significa transformar los datos en ceros y unos. Para nosotros, significa transformar los datos en algo significativo, como una asociación con un recuerdo existente, una imagen, o un sonido.

El segundo proceso es el almacenaje real, que significa simplemente "guardar" la información. Para que esto suceda, el ordenador debe escribir físicamente el 1 y el 0 en el disco duro. Esto es muy similar en la memoria humana porque significa que debe producirse un cambio fisiológico para que la memoria sea almacenada.

El proceso final se llama la recuperación, que consiste en extraer la memoria del lugar donde está guardada e invertir el proceso de la codificación. Es decir, devolver la información a una forma similar a lo que almacenamos.

La diferencia principal entre los seres humanos y los ordenadores en términos de memoria, tiene que ver con el modo cómo se almacena la información. En su mayor parte, los ordenadores tienen solamente dos tipos; almacenamiento permanente y eliminación permanente. Los seres humanos, por otra parte, somos más complejos porque tenemos tres modos de almacenaje distintos:

1. La memoria sensorial. Hace referencia a la información que recibimos a través de los sentidos. Esta memoria es muy breve, pues dura solamente algunos segundos.

2. Memoria a corto plazo (MCP). Toma el control cuando la información de nuestra memoria sensorial se transfiere a nuestra consciencia; es decir, cuando somos conscientes de ella. Ésta es la información que es actualmente activa, por ejemplo, al leer esta página, hablar con un amigo, o escribir una carta.

La memoria a corto plazo puede durar más tiempo que la memoria sensorial (hasta 30 segundos aproximadamente), pero todavía tiene una capacidad muy limitada. Según la investigación, podemos recordar aproximadamente de 5 a 9 (7 +/- 2) unidades de información en nuestra memoria a corto plazo en un momento dado.

Pero si la MCP dura solamente hasta 30 segundos, ¿cómo logramos terminar algún trabajo? ¿No tendríamos que empezar de nuevo a concentrarnos cada 30 segundos? Esta discusión incitó a los investigadores a buscar una segunda fase de MCP que ahora recibe el nombre de memoria de trabajo. La memoria de trabajo es el proceso que tiene lugar cuando nos centramos en el material de trabajo durante más tiempo del que permitiría la memoria a corto plazo por sí sola.

¿Qué sucede cuando nuestra memoria a corto plazo está llena y entra otra unidad de información? El desplazamiento significa que la nueva información eliminará la antigua información y ocupará su lugar. De repente alguien te dice el código de área para ese número de teléfono y te olvidas casi inmediatamente de los dos últimos dígitos del número. Sin embargo, podemos mejorar nuestra capacidad de memoria a corto plazo, dominando ciertas técnicas y practicando, lo cual nos permite que visualicemos, escuchemos, digamos o incluso veamos la información de manera repetida y con diversos sentidos.

Factores que influyen en la retención y el olvido 
Si alguna vez has pasado veinte minutos buscando las llaves del coche sólo para encontrarlas en tu bolsillo delantero, sabes que los procesos de memoria no son infalibles. Hay varios factores que influyen en la retención u olvido de la nueva información. Aunque no puedes alterar todos estos factores para mejorar la retención, modificar algunos hábitos de estilo de vida pueden mejorar tu memoria. 

Edad 
La mayoría de las personas experimentan una disminución natural de la capacidad de memoria con la edad. Los adultos mayores olvidan detalles más fácilmente y dejan de retener información nueva. Los lapsos menores no significan que tienes demencia, pero pueden ser simplemente una consecuencia de la edad. Si encuentras que tu olvido causa problemas importantes en tu vida diaria, tales como la incapacidad de tomar tus medicamentos o cuidar de ti mismo, consulta a un médico o un neuropsicólogo clínico para una evaluación. 

Interferencia
Tu cerebro codifica la información en forma de recuerdos que debes recuperar cuando los necesitas. Para retener con éxito una información, debes recuperar con precisión un recuerdo específico de todo tu cerebro. La interferencia se refiere a una incapacidad para recordar algo por la competencia de la información. Por ejemplo, si previamente has aprendido francés y luego comenzaste a tomar clases de alemán, el vocabulario alemán puede interferir con tu capacidad de escribir una frase en francés. 

Ensayo 
El número de veces que ensayas la información puede afectar tu capacidad de retenerla con precisión. La exposición a una información una sola vez no puede ser suficiente para recuperarla con mayor precisión en el futuro. Ensayar varias veces en el transcurso de unas pocas horas mejora la retención. La gente a veces utiliza esta técnica para aprender el nombre de un conocido. Repetir el nombre para ti mismo en varias ocasiones y usar la voz alta cuando hablas con la persona mejora la retención. 

Enfermedad mental y física
Una variedad de enfermedades mentales y físicas afectan el olvido. La enfermedad de Alzheimer, demencia de cuerpo de Lewy y demencia vascular son ejemplos de enfermedades que influyen en tu capacidad para retener información. Otras enfermedades pueden causar falta de memoria en edad temprana o media. La depresión, el hipotiroidismo, la enfermedad de Huntington, la enfermedad de Tay-Sachs y otras condiciones médicas pueden disminuir tu capacidad para retener la información. Busca atención médica si comienzas a tener problemas para recordar información. 

Estilo de vida
Tus opciones de estilo de vida influyen en tu capacidad para retener información nueva. Comer mal causa fatiga y lentitud, lo que puede afectar negativamente a tu memoria. Come muchas frutas y verduras para obtener la vitamina B-12, la cual es importante para los procesos de memoria saludables. Experimentar estrés, ansiedad o insomnio también pueden causar olvido. Estos efectos suelen ser temporales, aliviar el estrés y mejorar tus hábitos de sueño hará que los problemas de memoria desaparezcan.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por participar en esta página