TU ESFUERZO TAMBIEN ES NUESTRO

El ejercicio es la clave para la Educación Física y la mente.

HAY MUCHAS MANERAS DE DIVERTIRNOS SANAMENTE

La recreación no constituye un lujo sino una necesidad.

NO DIGO QUE VALLA A SER FÁCIL, SIN DUDA, MERECERÁ LA PENA

La distancia entre el querer y el poder, se acorta con el entrenamiento.

UNEFM CABLO DABAJURO APOYANDO EL DEPORTE EN LA COMUNIDAD

Es mas valioso un gramo de acción que una tonelada de intención.

Suscribete y recibe actualizaciones por Email

Ingresa tu correo aquí:

sábado, 1 de abril de 2017

LA DICCIÓN

La dicción es la modulación de la voz en el acto de hablar. Tiene un aspecto anatómico y fisiológico, ya que interviene toda la estructura física que participa en el lenguaje: el diafragma, la laringe, la faringe, los labios, la boca, el paladar y las cuerdas vocales. Si hubiera una anomalía en uno de estos elementos, la voz se resentiría y la dicción dejaría de ser la misma.

Ya desde la antigüedad la dicción era una herramienta importante para la comunicación. De hecho, tanto la retórica, la oratoria como la dialéctica eran conocimientos muy valorados, tanto en el mundo clásico como en la Edad Media. Estos conocimientos necesitaban de una correcta dicción para ser plenamente efectivos en la utilización del lenguaje hablado. Esta idea sigue vigente en la actualidad, pues una buena o mala dicción puede ser determinante. Pensemos en un hipotético político con capacidad, buenas ideas, pero con un defecto en la dicción. Si no consigue solucionar este problema, su fracaso político será más que evidente.

En la actualidad, hay profesionales que intentan corregir los defectos y las imperfecciones en la dicción. Son los logopedas y los foniatras. Estos especialistas van modulando las anomalías del lenguaje y de la voz mediante una serie de ejercicios y técnicas.

Hay profesionales que necesitan de una dicción de gran calidad técnica para realizar su actividad laboral. Un ejemplo llamativo es el de los locutores de radio. Su dicción tiene que ser clara y nítida, sin vicios en la pronunciación, con una correcta musicalidad, sin monotonía en el tono y, en definitiva, con todos los elementos que intervienen en la comunicación en óptimas condiciones. Hay otras actividades y profesiones que también requieren una dicción de calidad: los actores ( especialmente los de doblaje ), los cantantes, los políticos y cualquiera que se dedique a la comunicación.

En relación a los defectos o los vicios que pueden provocar una dicción deficiente hay un número considerable: las cacofonías, los anacolutos, la dificultad de pronunciar las erres, un tono excesivamente plano y sin matices en la voz, etc. Los especialistas en la dicción creen que el acento de cada persona al hablar no es necesariamente un problema y no hay que renunciar a él. En principio, todos los acentos son válidos, aunque la tendencia en los medios de comunicación es que el habla de los locutores sea lo más neutra posible.

LA ORATORIA

La oratoria es el género literario en prosa que tiene como finalidad convencer, persuadir, exponer o conmover por medio de la palabra hablada. El dominio de la palabra está ligado íntimamente a la historia y el desarrollo literario romano, puesto que éste era usado como herramienta política para conseguir prestigio y poder. En un principio, se daba mayor importancia a la integridad moral que a las cualidades formales del discurso, como se pudo ver en el año 101 a.C. tras la expulsión de Roma de unos profesores griegos de retórica, ya que, según decían, “corrompían las virtudes antiguas”. Pero con el tiempo se fueron asimilando las preceptivas retóricas griegas y comenzaron a abrirse escuelas de retórica.

Características
La oratoria se caracteriza por la búsqueda de un fin práctico como la absolución de un cliente, la condena a un reo, la propaganda de ideas políticas, cambios legislativos, etc.; y por el contacto directo entre el orador y su público.

Clasificación según sus temas:
Los discursos pueden clasificarse según el tema o la intención de éstos. Así, pueden ser:
• Judiciales o forenses: pronunciados ante un tribunal, y a su vez pueden ser de defensa o acusación.
• Políticos: pronunciados en el foro o en el Senado.
• Panegíricos o demostrativos: en los que se critica situaciones concretas o se alaba a personajes de poder.
• Deliberativos: donde se justifica el hecho de que alguna decisión pueda resultar útil o dañina.

Clasificación según sus partes:
Todo buen discurso debe estructurarse en una serie de partes:
• Exordium: comienzo del discurso. El orador intenta ganarse la atención o el favor de los oyentes y presenta el tema del discurso.

• Narrativo: exposición de los hechos donde prima la sencillez y la claridad.

• Argumentativo: se divide, a su vez, en probatorio, donde se argumenta los elementos que contribuyen a apoyar la causa que se defiende; y refutatorio, en la que se refutan las tesis contrarias, adelantándose a ellas.

• Perorativo: recapitulación y conclusión final. El objetivo es conmover a los oyentes.

Organización del orador: Para poder realizar estas pautas, el orador precisa de unas facultades fundamentales para ser capaz de construir un buen discurso, como son:
• inventivo (recopilación de datos para la argumentación y refutación.)
• dispositivo (colocación de elementos de forma ordenada).
• elocutivo (redacción del discurso de forma estilística).
• memoria (memorización del discurso).
• activo (exposición del discurso).

Finalidad del discurso:
La finalidad del discurso puede ser la de instruir (docere), agradar (delectare) o emocionar (movere) y hay un estilo propio adecuado a cada uno de ellos.

Autores:
En la oratoria primitiva destacan Marco Porcio Catón, enemigo de la corrupción política y moral. Escribió más de 150 discursos de los que se conservan 80; Tiberio y Cayo Graco, defensores de los derechos del pueblo frente a los abusos de los magistrados y la aristocracia. Sin embargo, la figura más destacada de la oratoria es Marco Tulio Cicerón, el más elocuente de los oradores latinos. Estudió retórica griega, derecho y filosofía con los mejores maestros de la época. Ya desde sus comienzos obtuvo victorias en los tribunales. Escribió varios tratados de retórica, y adoptó una posición media entre la escuela asianista y la aticista. Sus tres grandes obras retóricas de tipo teórico son:

• De Oratote, donde dos oradores romanos, Ausonio y Craso, dialogan sobre la figura del orador perfecto. En este diálogo se exponen de forma magistral las ideas ciceronianas sobre las distintas facultades retóricas (inventivo, dispositivo, elocutivo, memoria y activo).

• Brutus traza una historia de la elocuencia romana, desde sus comienzos hasta su propia época, para demostrar que la tradición oratoria de Roma no tiene nada que envidiar a la griega.

• Orator, en la que se aborda la triple función del orador: docere, delectare y flectere (enseñar, deleitar y convencer). Sin embargo, se centra especialmente en la elocutio, mostrando los diferentes recursos estilísticos del discurso, el ritmo oratorio,… Los discursos más importantes de Cicerón son: • In Verrem: siete discursos pronunciados en defensa de los derechos de los sicilianos contra Verres. • De lege Manilia: discurso político en el que elogia las grandes cualidades de Pompeyo. • In Catilinam: cuatro discursos pronunciados ante el Senado y el pueblo de Roma para desenmascarar el intento de golpe de estado de Catalina. • Philippicae: catorce discursos contra Marco Antonio. 3. De la oratoria de época imperial destaca Quintiliano, cuya única obra que se ha conservado, Institutio oratoria, es un completísimo tratado en doce libros sobre la formación del orador. Quintiliano es partidario de la imitación de Cicerón, al que considera máximo modelo.

EL DISCURSO
El hombre es un ser sociable, por lo tanto establece con los demás diferentes formas de comunicación. La más rica y compleja es la comunicación lingüística, ejecutada bajo la forma de una unidad expresiva conocida como discurso.

Algunas definiciones para discurso
Según el uso corriente un discurso es un mensaje (verbal y oral) dirigido a un público.

Su principal función ha sido desde sus orígenes comunicar o exponer, pero con el objetivo principal de persuadir.

También podemos decir que un discurso es un acto de habla, y por tanto consta de los elementos de todo acto de habla.

El discurso es el razonamiento extenso dirigido por una persona a otra u otras, es la exposición oral de alguna extensión hecha generalmente con el fin de persuadir, y que está conformada por tres aspectos: Tema o contenido del discurso, Orador y Auditorio.

En lingüística y en las ciencias sociales y cognitivas el discurso es una forma de lenguaje escrito (texto) o hablado (conversación en su contexto social, político o cultural).

En la antropología y la etnografía se habla también de evento de comunicación.

En la filosofía, por ejemplo con Foucault, un discurso es más bien un sistema de discursos, un sistema social de pensamiento o de ideas.

En el psicoanálisis, la noción de discurso se basa en la lógica, pero incorpora los aportes de la lingüística, la antropología, la filosofía y la historia, entre otras disciplinas.

Debido a la multiplicidad de los enfoques, el discurso se puede definir como una estructura verbal, como una situación comunicativa cultural, una forma de interacción, un sentido, una representación mental, un signo, etc. Tanto el discurso hablado como el discurso escrito (texto) se considera hoy en día como una forma de interacción contextualmente situada.

Como estructura verbal, un discurso es una secuencia coherente de oraciones. La coherencia global se define por los temas o tópicos que se expresan por ejemplo en los titulares o los resúmenes del discurso.

Como interacción (conversación, diálogo) el discurso es una secuencia coherente de turnos y acciones de varios participantes, en que cada acto se lleva a cabo en relación con el anterior, y prepara el siguiente.

Tipos de discurso
Pensado como mensaje, el discurso es una unidad más amplia que la oración.

Se compone de dos o más oraciones que desarrollan un tema. Según la intención que predomine en el mensaje que se ha de transmitir, el emisor utiliza diferentes tipos de discurso.

a) Según el tipo de canal
  • Discursos orales
  • Discursos escritos
b) Según las funciones del lenguaje
  • Discurso informativo o referencial
Es aquel que transmite datos concretos y conceptos precisos. Es decir, el discurso informativo se propone transmitir un mensaje en forma objetiva.

La función referencial o informativa del lenguaje se pone de manifiesto cuando el emisor comunica conocimientos acerca del mundo que lo rodea o de si mismo, en una relación de sujeto-objeto, es decir, poniendo distancia frente a sus emociones ; por lo tanto, su intención está en el factor “referente” del circuito comunicacional.

Los rasgos caracterizadores de esta función son los siguientes:
  • Uso de la tercera persona, singular o plural (acento puesto en el referente)
  • Uso del modo verbal indicativo
  • Uso de vocablos (sustantivos) unívocos o monodémicos (uso recto del lenguaje)
  • Uso de vocabulario técnico

Aportación de datos precisos de ubicación espacio-temporal, de dimensiones o magnitudes, etc.

Uso de oraciones impersonales o de matiz impersonal (verbo haber usado como impersonal; verbos de la tercera persona plural usados como impersonales; uso de “se”como signo de impersonal o de pasiva

Uso de la primera persona del plural aun cuando el emisor es uno solo.

Discurso expresivo o emotivo
Es aquel que denota emociones, sentimientos y aclaraciones.

La función expresiva o emotiva del lenguaje se pone de manifiesto cuando el emisor comunica sus sentimientos; por lo tanto, la intención del que codifica el mensaje esta centrada en el factor emisor del circuito comunicacional .

En una comunicación verbal, esta función se manifiesta a través del predominio de todos o algunos de los siguientes rasgos:
  • Uso de la primera persona singular (acento puesto en el emisor)
  • Uso de oraciones exclamativas, desiderativas y dubitativas
  • Uso de vocablos que denotan sentimientos
  • Uso de interjecciones

Debido a la subjetividad que caracteriza a los discursos en los que predomina esta función, los mismos no admiten ser valorados según el criterio de verdad. Es decir, ante la manifestación de los sentimientos de alguien, solo podemos ser compresivos o quedarnos indiferentes, compartirlos o rechazarlos, pero no podemos decir de ellos que sean verdaderos o falsos.

Discurso apelativo o conativo
Es aquel que intenta actuar sobre el oyente para persuadirlo, ordenarle o pedirle algo.

La función apelativa del lenguaje se pone de manifiesto cuando el emisor se comunica con el fin de provocar en el receptor alguna acción; por lo tanto, su intención está centrada en el factor receptor del circuito comunicacional.

Los rasgos caracterizadores de esta función son los siguientes:
  • Uso de la segunda persona singular o plural ( acento puesto en el receptor )
  • Uso del modo verbal imperativo
  • Uso de oraciones exhortativas o imperativas
  • Uso de oraciones interrogativas

Debido a que los discursos en que esta función se manifiesta como dominante tienen valor de exhortación u orden, éstos tampoco pueden ser valorados de acuerdo con un criterio de verdad sino de razonabilidad. Los pedidos, las órdenes, los consejos pueden valorarse como razonables o no, adecuados o inadecuados, pertinentes o impertinentes, pero nunca como verdaderos o falsos.

Discurso fático
El mensaje establece contacto, comprueba si está libre el canal. Ejemplo: ¡Hola! ¡Hola! ¿Quién habla? (Por teléfono)

Los rasgos caracterizadores de la función fática del lenguaje son los siguientes:
  • Oraciones interrogativas cuyo contenido está relacionado con el establecimiento del canal (‘¿me estás escuchando?’)
  • Uso de palabras cuyo significado permite evidenciar el canal comunicativo (verbos ‘oír’, ‘leer’).
Discurso metalingüístico
El mensaje habla del mismo lenguaje. La función metalingüística del lenguaje se pone de manifiesto cuando el emisor se comunica para hacer referencia al uso que se está haciendo de las palabras, a cómo se escriben, a qué clase pertenecen, etc.

Discurso poético
Se pone el acento en la configuración del mensaje. La función poética del lenguaje se pone de manifiesto cuando el emisor intenta transmitir una emoción estética, agradar por medio de la codificación de un mensaje bello; por lo tanto el acento está puesto en el factor mensaje del circuito comunicacional.

Los rasgos caracterizadores de esta función son los siguientes:
  • Uso de todas las personas gramaticales (en el caso de la literatura, podemos relacionar cada una de ellas con cada uno de los géneros literarios tradicionales: primera persona, con el genero lírico; segunda persona, con el genero dramático; tercera persona, con el genero narrativo).
  • Uso de todos los modos verbales y, en consecuencia, de todo tipo de oración según actitudes del hablante.
  • Uso de vocablos equívocos o polisémicos

Adjetivación subjetiva
  • Uso figurado del lenguaje (lo cual se logra por medio del uso de los distintos recursos poéticos).
  • Uso de distintos recursos poéticos relacionados con la sintaxis, la morfología , la semántica, la fonología (paralelismos, anáforas, antítesis, rima, etc.).
Debido al carácter subjetivo de los discursos en los que predomina esta función ellos no pueden ser valorados con un criterio de verdad ni de razonabilidad ni de comprensión, sino con un criterio estético.

c) Según las variaciones del lenguaje:
Las variaciones del lenguaje se dan por tres circunstancias: socioculturales, geográficas y sociales y por el registro.

Socioculturales
Discurso familiar: utiliza una lengua coloquial, no formal, interna.

Discurso formal: se vale de una lengua cuidada, eliminando regionalismos y expresiones de la vida cotidiana.

Discurso técnico o profesional: es propio de determinadas profesiones u oficios. Se caracteriza sobre todo por el vocabulario específico.

Dentro de las circunstancias socioculturales encontramos también discursos que se caracterizan por tener lenguajes especiales. Y como ejemplo tenemos a aquellos discursos con un nivel propio de los adolescentes y/o las mujeres.

d) Según el modo de construcción
Existen discursos en donde puede haber narración, descripción, diálogo y exposición. 

Discurso narrativo
Tipo de texto que relata uno o una serie de acontecimientos que han sucedido a través del tiempo. Éstos son, generalmente, hechos vividos por un personaje real o imaginario, en un cierto período de tiempo.

Los elementos fundamentales que encadenan el desarrollo de la narración son: la acción, los personajes o tipos y el ambiente.

Finalmente, la narración puede ser literaria o no literaria; como textos narrativos literarios, podemos mencionar el cuento, la novela, la leyenda, la fábula, el mito, etc. Dentro de los no literarios, aquellos que no tienen una intención estética, los textos de historia, las memorias, biografías, la crónica, el reportaje, etc.

Discurso descriptivo
Tipo de texto cuyo propósito principal es entregar información concreta acerca de cómo es o ha sido una persona, experiencia, objeto, lugares, sensaciones o sentimientos. Este tipo de texto puede ser objetivo -una descripción técnica- o subjetivo -descripción de lugares, sensaciones, etc.-

La información no se encuentra organizada secuencial o temporalmente.

Discurso o texto expositivo (o explicativo)
Este tipo de discurso o texto tiene como función establecer una relación de influencia entre emisor y receptor; el emisor, en el momento de la enunciación, se atribuye y atribuye roles al receptor, provocando en este la reacción que él desea.

El emisor presenta el tema de manera que el receptor sienta un interés personal, al revelar el punto de vista interno del emisor en relación con lo que dice sobre el mundo tiene un propósito referencial; brinda al receptor información abstracta que pueda resultar necesaria; da información objetiva acumulativa de un tema; presenta una formulación razonada (idea central, hipótesis, demostración) que requiere conocimiento del tema y un desarrollo progresivo y articulado de ideas. Normalmente se asocia con la argumentación en donde se incluye la información persuasiva.

Discurso argumentativo
Tipo de texto que induce a una interpretación abstracta de hechos o detalles; no se sitúa en el tiempo ni en el espacio, sino en el pensamiento, respetando la secuencialidad de una cadena razonada; tiene como objetivo persuadir al receptor de la veracidad de una idea o de la interpretación de la realidad, apelando a los sentimientos y emociones en las personas.

Es una relación entre un argumento y una conclusión. Se organiza en torno a tres elementos: tesis u opinión o postura que se defiende; los argumentos que confirman o rechazan la tesis y la conclusión que reitera la tesis apoyada por los argumentos.

Discurso instructivo
Tipo de texto que plantea instrucciones de manera lineal y no jerarquizada, ordenadas por argumentos de naturaleza exclusivamente temporal. Presenta, además, un predominio de la función apelativa y representativa.

Discurso dialogal o dialógico
Es un discurso eminentemente colaborativo. Los sujetos de un discurso dialógico participen como hablantes y como oyentes. De este modo, cuando un interlocutor está hablando el otro está oyendo. Entre ellos destacan la conversación, el debate y la entrevista.

Respecto al contenido, es importante destacar que en un discurso dialógico pueden exponerse varios tópicos distintos.

e) Según la intención estética:
  • Discursos literarios
  • Hay intención estética de producir efectos de belleza.
  • Discurso no literario
  • No se manifiesta la intención estética.


RELACIONES SINTAGMÁTICAS Y PARADIGMATICAS

Las unidades lingüísticas están interrelacionadas íntimamente por dos tipos de relación: sintagmáticas y paradigmáticas; las primeras son directamente observables, están presentes, mientras que las segundas hay que intuirlas, están ausentes. Ambas se complementan y no pueden concebirse separadas.


Relaciones sintagmáticas: son relaciones combinatorias en presencia de otros elementos lingüísticos, se dan entre los elementos sucesivos del enunciado, están presentes. Se relacionan expansivamente unas tras otras según el orden posicional de los elementos de un enunciado. Son relaciones de sentido que cada signo lingüístico mantiene con los restantes de diversa categoría gramatical , bien sea en un mismo sintagma o en la oración.

Relaciones paradigmáticas: son las relaciones de sentido existentes entre los signos de la misma categoría sintáctica, son las relaciones asociativas que se dan entre las unidades del sistema, es decir, entre las unidades simultáneas (forman el paradigma), están ausentes. .

Estructuras sintagmáticas y paradigmáticas

Estructura sintagmática: conjunto de palabras agrupadas en torno a un núcleo con una misma función sintáctica y de sentido. Es toda estructura sintáctica constituida por una o más palabras. La combinación se produce en presencia de otros elementos lingüísticos.

Ejemplo:
Amigo – SN Mi amigo - SN Mi amigo bueno – SN Mi amigo bueno de mi colegio – SN Mi amigo bueno de mi colegio el más juguetón – SN Mi amigo bueno de mi colegio el más juguetón como mi perro

Estructura paradigmática: es la relación vertical de los signos por ausencia de otros elementos lingüísticos. Continuamente están en relación paradigmática todas las desinencias de un radical verbal, donde aparece una, puede aparecer, sustituyéndola, cualquiera de las demás del paradigma verbal.

Un paradigma es una serie de elementos que pueden ocupar una misma situación, teniendo en cuenta que mutuamente pueden sustituirse y que el empleo de uno de ellos excluye el uso de todos los demás del paradigma. Están, pues, en oposición, el valor de cada elemento aparece en oposición a los demás del paradigma, constituye un conjunto cerrado o acabado en sincronía: al utilizar la palabra notable, se excluye sobresaliente, aprobado y suspenso, pues los cuatro términos pueden ocupar esa posición, forman un paradigma a nivel semántico. Ejemplo:

Las palabras Mesa y Peso son paradigmáticas.

En la lingüística moderna se designa con este nombre al conjunto de unidades que pueden aparecer e intercambiar en un contexto determinado.
Los constituyentes inmediatos
La teoría de la estructura en constituyentes inmediatos, plantea que las oraciones no están formadas por una simple sucesión de elementos, sino por una combinación de construcciones que forman los constituyentes de una oración, los que a su vez están formados por constituyentes de rango inferior, de ahí que una oración sea el resultado de muchas capas de constituyentes.

REDUNDANCIA, SÍNTESIS Y PREDICCIÓN DE LA LECTURA

La redundancia léxica se produce cuando se juntan dos palabras que repiten el mismo significado. A veces se usa para producir un efecto expresivo o intensificador: probablemente el efecto que se consigue con una orden como ¡sube para arriba! sea más eficaz que el del simple ¡sube! Este caso se denomina también pleonasmo y se considera aceptable por el aporte expresivo que supone la reiteración del significado.

Deben evitarse, sin embargo, las redundancias cuando son simples rellenos. Se trata, con frecuencia, además, de expresiones que se generalizan y se convierten en meros clichés.

Revisemos algunas de ellas:

a la misma vez: El adjetivo misma es redundante, basta con decir a la vez

a un mismo tiempo: En esta expresión se produce el cruce de dos estructuras de igual significado: a un tiempo y al mismo tiempo

accidente fortuito: Solo si se trata de un suceso fortuito puede hablarse de accidente; si no es fortuito, puede tratarse de un atentado, un acto premeditado.

actualmente en vigor: En vigor quiere decir que ‘rige, se usa o es válido en el momento de que se trata’. Solo es necesario especificar la vigencia para referirse a momentos diferentes del que se habla: en vigor hasta 1958; en vigor durante el siglo pasado.

asesinato premeditado: Un asesinato es un acto alevoso que causa la muerte de una persona y alevosía es la ‘cautela para asegurar la comisión de un delito, sin riesgo para el delincuente ‘ lo que exige premeditación.

Una síntesis en literatura, es un escrito donde se denotan las ideas principales de un texto. A diferencia del resumen, esta presenta las ideas generales del autor; por lo tanto, casi siempre es el autor quien la publica. En un libro, la síntesis literaria se presenta al principio; puede ser el punto de vista del autor sobre el libro, o un resumen del contenido.

Una síntesis es la composición de algo a partir del análisis de todos sus elementos. Se trata de la versión abreviada de cierto texto que una persona realiza a fin de extraer la información o los contenidos más importantes. 

En la síntesis, el lector puede expresar con sus propias palabras y estilo la idea principal del autor, cambiando el orden según sus intereses, utilizando analogías, trabajo de investigación, ampliación y confrontación con base en los objetivos. 

Una síntesis resulta ser una buena y efectiva forma de facilitar los procesos de aprendizaje. Es una herramienta que le permite a quien lo redacta comprender e interiorizarse en mayor medida en determinado contenido de su interés. 

Se basa en las ideas centrales de un texto, sin embargo, la construcción de una de ellas no resulta una tarea sencilla. Es importante que la síntesis de un texto, a pesar de ser obra de una persona diferente, sea un texto más pequeño que muestre la intención original que el autor del texto madre quiso reflejar, por lo tanto, es importante evitar incluir ideas nuevas o percepciones propias acerca de lo que se está queriendo resumir. Para la realización de una buena síntesis lo recomendado es realizar una lectura completa del texto, y luego, una segunda lectura en la que se subrayan las ideas centrales. Durante el proceso de la relectura es de gran ayuda notar la estructura del texto, el que debiera contener una introducción, un desarrollo y una conclusión. De este modo, resultará más fácil organizar las ideas extraídas y redactar un nuevo texto sin modificar la intención del autor original. Al realizar una síntesis es importante y/o relevante el saber, que no debes crear un resumen de lo contrario, ya no es una síntesis.

Una inferencia es una evaluación que realiza la mente entre proposiciones. La inferencia es la acción y efecto de inferir, en otras palabras, deducir algo, sacar una consecuencia de otra cosa, conducir a un nuevo resultado. La inferencia nace a partir de una evaluación mental entre distintas expresiones, que al ser relacionadas como abstracciones, permiten trazar una implicación lógica.

En lógica formal, las inferencias son expresiones bien formadas (EBF) de un lenguaje formal que, al ser relacionadas, permiten trazar una línea lógica de condición o implicación lógica entre las diferentes EBF. De esta forma, parte de lo verdadero a lo falso: posible (como hipótesis) o conocida (como argumento) de alguna o algunas de ellas, puede deducirse la verdad o falsedad de alguna o algunas de las otras EBF. Surge así lo que conocemos como postulado o transformada de una expresión original conforme a reglas previamente establecidas, que puede enmarcarse en uno o varios contextos referenciales diversos, obteniéndose en cada uno de ellos un significado como valor de verdad de equivalente.

La predicción en un texto es lo que el lector cree que va a encontrar en el, la idea mental que construye en base, por ejemplo, al título de la obra o al tema seleccionado. En ocasiones, podemos verificar esta predicción según vamos leyendo el texto, pero en otras ocasiones, nuestra predicción es errónea, lo que esperábamos encontrar no aparece y en su lugar descubrimos una nueva historia diferente a la imaginada. 

Es clave destacar que las predicciones no se hacen solamente en novelas, sino que las hacemos en cualquier tipo de texto que vayamos a leer, sea del tema que sea. 

Cuando leemos con niños, sus predicciones son muy peculiares. Si estamos con un grupo, y uno empieza a leer, en ocasiones puede omitir palabras del texto para poner su propia predicción, que ha podido estar basada en una ilustración o en su propia idea del tema del cuento. 

Una de las estrategias que se proponen en el libro es que cuando un niño está leyendo un párrafo, y hay una palabra que, por su dificultad lectora, no pronuncia bien, el adulto tiene que indicarle en qué ha fallado, porqué y el significado de la palabra, si esto no pasara, el niño seguiría leyendo sin problema y nunca aprendería de sus propios errores. 

Según Collins y Smith (1980), las predicciones en los textos pueden surgir de: 

· La atribución de características permanentes (guapo, alto, simpático…) o temporales (contento, triste, enfadado…). Se espera que alguien guapo actúe de una determinada manera, alguien simpático de otra diferente. 

· Las situaciones de los personajes. En función de la situación, la reacción será diferente. 

· Las relaciones entre los personajes hacen que actúen de determinadas maneras. 

· Si aparecen objetivos contradictorios a un mismo personaje. 

· Un cambio brusco en la situación de un personaje. 

Algunos autores, como Anderson y Pearson (1984) piensas que hay una correlación entre los organizadores de los textos y los títulos y subtítulos. Su función es indicar al lector unos conceptos previos que les ayudaran en la lectura del texto y a situarse dentro del tema. 

Según Brown, Campione y Day (1981), hay unas ideas principales según diferentes estrategias de lectura, para conseguir unos objetivos lectores: 

La omisión de contenidos del texto que pueden ser redundantes. 

La sustitución de conjuntos de conceptos o acciones por un solo concepto. 

La selección o creación de una síntesis del tema, para indicar los objetivos que se quieren conseguir con la lectura. 

Por lo tanto, las predicciones que realizamos en la lectura y su verificación cuando hemos leído implican leer de manera más precisa y más eficaz.

LAS ESTRATEGIAS DE LA LECTURA

como su nombre lo dice, son varias actividades que realizamos mientras leemos y nos ayudan a comprender lo leído para poder obtener la información que buscamos, interpretar los textos y disfrutar de la lectura. Entonces, quien aplica las estrategias de lectura es quien lee para sí mismo, pero nos corresponde mostrar a los alumnos las estrategias que usa un lector o escritor experimentado, para localizar información puntual en cualquier texto y hacer deducciones e inferencias que permitan una mejor comprensión de lo leído.

Hay muchas estrategias de lectura, pero nos enfocaremos en las Estrategias Básicas de Lectura (presentadas con mayor claridad en los programas de estudio de Español de primaria 1993), explicando cómo aplicarlas cuando leemos para, y con los niños, para que se apoderen de ellas y que cuando les corresponda leer las utilicen con naturalidad.

Muestreo.
Es cuando tomamos partes de la información que tenemos (palabras, imágenes o ideas) que funcionan para lograr la comprensión de las demás partes. Esta estrategia está muy relacionada con la predicción e inferencia pero no se limita a ellas.

Las mejores muestras que podemos tomar son el título y los subtítulos. Ellas nos pueden indicar, en gran medida, si la información que buscamos estará en ese párrafo o texto. En caso de no haber comprendido la información, son estas muestras las que nos podrán “centrar” en el tema.

Algunas formas de promover la adquisición de esta estrategia son:
  • Decirles el título del libro a leer y promover que los niños inventen una historia a partir de él.
  • Leerles un texto y pedir que le pongan título.
  • Leerles frases o textos que sólo contengan sustantivos y verbos y dejar que ellos complementen, con palabras de su elección, sin perder el sentido.

Al aparecer una palabra desconocida por ellos, pedirles que traten de definirla considerando lo demás que hay escrito en torno a esa palabra.

Saltarse partes del texto y hacer preguntas para llenar la información que falta.

Leerles noticias y rescatar los datos principales.

Predicción.
Simplemente es suponer y decir lo que sucederá después, para esto, al leer nos apoyamos en el conocimiento previo que tenemos del mundo. Esta estrategia nos permite “saber” el final de una historia, la lógica de una explicación, la continuación de una carta, etcétera, antes de conocerlos.

Cuando leemos predecimos naturalmente por tres razones: porque siempre estamos más interesados en lo que pasará que en lo que esta pasando, porque hay varias formas de interpretar la información que estamos recibiendo, y porque predecir nos permite escoger una opción entre varias posibles.

Cuando leemos para niños debemos:
  • Hacerles preguntas para averiguar qué conocimientos previos tiene del tema.
  • Preguntarles acerca de experiencias relacionadas con lo que se les está leyendo.
  • Hacerles preguntas de lo que creen que pasará y pedirles que lo justifiquen.
  • Pedirles que describan a los personajes o los lugares (sin haber visto imágenes).
  • Hacer pausas antes de terminar la frase que estamos leyendo para que ellos la terminen.
  • Mostrarles secuencias de imágenes y pedirles que las ordenen y expliquen su secuencia.
  • Darles imágenes sin relación y pedirles que hagan una historia con ellas.
Anticipación.
Esta estrategia está muy relacionada con la predicción, pero sin necesidad de justificación. Aunque el lector no se lo proponga, mientras lee va haciendo anticipaciones, pueden ser al esperar que la frase termine con alguna palabra, al darle un significado al tema.

Las anticipaciones de los niños serán más precisas mientras más información tengan sobre los conceptos relativos a los temas, al vocabulario y a la estructura del tipo del texto que lee.

Además de las sugerencias que sirven para favorecer la Predicción, también se puede:
  • Hacer una pausa cada que en la lectura aparece un verbo transitivo (llevar, cargar, conseguir) y pedir que ellos la terminen.
  • Enseñarles la imagen siguiente y sugerir que continúen con la historia.
  • Preguntarles qué creen que pasará después.

Confirmación y Autocorrección.
Las predicciones y anticipaciones que hace un lector, generalmente son acertadas y coinciden con lo que realmente aparece en el texto. Es decir, el lector las confirma al leer. Sin embargo, hay ocasiones en que las predicciones o anticipaciones son incorrectas. Aquí es donde interviene la confirmación y autocorrección.

Las sugerencias para favorecer esta estrategia en los niños a quienes leemos son:
  • Pedirles que hagan predicciones y anticipaciones para después confirmarlas en la lectura.
  • Preguntarles qué diferencias hay entre lo que ellos creían que pasaría y lo que pasó.
Inferencia.
Es el hecho de suponer las causas de lo que se ha dicho o leído, basándose en los conocimientos previos que se tienen del mundo. También implica unir o relacionar las ideas que hay entre los párrafos del texto e incluso entre textos. Otra forma de inferir es dar sentido adecuado a palabras y frases que tienen más de un significado o a palabras desconocidas.

Inferir es ser capaz de interpretar lo que está escrito.

Al leer para niños es conveniente que detengamos la lectura para pedirles que nos explique:
  • Las razones de los hechos.
  • Las causas de lo que los personajes sienten.
  • El razonamiento detrás de lo que los personajes deciden.
Monitoreo.
Consiste en evaluar la comprensión que se va alcanzando durante la lectura, lo que conduce a detenerse y volver a leer o a continuar encontrando las relaciones de ideas necesarias para la creación de significados.

Para favorecer el uso de esta estrategia se pueden realizar actividades, durante y después de la lectura, que nos permitan determinar:
  • La atención que se ha prestado a la lectura.
  • Las ideas que se formularon a partir del texto.
  • La comprensión de la secuencia de hechos.
  • El recuerdo de los detalles.


LA LECTURA

Se entiende al proceso de aprehensión de determinadas clases de información contenidas en un soporte particular que son transmitidas por medio de ciertos códigos, como lo puede ser el lenguaje. Es decir, un proceso mediante el cual se traducen determinados símbolos para su entendimiento. Se puede optar por códigos de tipo visual, auditivo e incluso táctil, como ocurre con el Braille, un método que utilizan los no videntes. Cabe destacar que existen alternativas de lectura que no necesariamente se respaldan en el lenguaje, como sucede por ejemplo con los pictogramas o la notación.

La mecánica de la lectura implica la puesta en marcha de varios procesos. La fisiología, por ejemplo, ofrece la posibilidad de analizar y entender la capacidad de lectura del ser humano desde una perspectiva biológica (estudiando el ojo y la habilidad para fijar la visión).

La psicología, por su parte, contribuye a conocer el proceso que se pone en funcionamiento en la mente cuando alguien lee, tanto para interpretar símbolos, caracteres e imágenes como en la asociación de la palabra con lo que ese término representa.

La lectura consta, básicamente, de cuatro pasos: la visualización (un proceso discontinuo, ya que la mirada no se desliza de manera continua sobre las palabras), la fonación (la articulación oral, consciente o inconsciente, a través de la cual la información pasa de la vista al habla), la audición (la información pasa al oído) y la cerebración (la información llega al cerebro y culmina el proceso de comprensión).

Existen diversas técnicas a la hora de iniciar una lectura, que permiten adaptar la forma de leer al objetivo que desea alcanzar el lector. Generalmente, se busca maximizar la velocidad o la comprensión del texto. Como estos objetivos son contrarios y se enfrentan entre sí, la lectura ideal implica un equilibrio entre los dos.

La lectura ofrece muchas ventajas para quienes la toman como un hábito imprescindible en sus vidas. Entre algunas de las riquezas que produce se encuentra, un enriquecimiento del universo interno y de la comprensión de otras realidades, adquisición de conocimientos que podrían servirnos, mejoramiento de nuestra capacidad comunicativa (sobre todo si se realiza una lectura oral) y colaborar con el desarrollo de la capacidad de análisis, resolución de problemas y asociaciones. Además, no debemos olvidar que es una fuente de entretenimiento apto para todas las edades, sexos y condición social. El secreto para apasionarse con la lectura reside en saber encontrar aquello que se adapta a nuestros deseos, intereses y necesidades.

Para que la lectura sea provechosa es muy importante que previamente se conozca el propósito de dicha actividad, cuál es la razón por la que deseamos leer; una vez hemos resuelto esto podemos buscar materiales que nos permitan alcanzar dicho objetivo y predisponernos para una lectura satisfactoria.

RESUMEN, SÍNTESIS, ENSAYO, REPORTE DE LECTURAS, CITAS Y REFERENCIAS

Resumen.
Consiste en reducir un texto de tal forma que este solo contenga cuestiones importantes, las cuales se caracterizaran por: fidelidad en las palabras, puntos importantes adecuadamente destacados y que exista conexión entre ellos.

El resumen no solo es beneficioso porque estimula la capacidad de síntesis, sino que es también fundamental para mejorar la expresión escrita, la cual es decisiva en un examen.

Así mismo, la organización lógica del pensamiento que requiere la escritura es el mejor método para profundizar en la compresión. Por eso nunca hay que limitarse a copiar fragmentos. Tenemos que escribir con nuestras propias palabras después de reflexionar.

El objetivo especificado de los resúmenes es la representación sintética y objetiva de lo leído o escuchado.

Características:
  • Orden en las ideas.
  • Claridad.
  • Concisión.
  • Deben ser personales.
  • Usar abreviaturas, códigos y signos.
Los resúmenes son recomendables para consignar, entre otras cuestiones:
  • La clase expuesta por el profesor.
  • Lecturas adicionales.
  • Conferencias.
  • Discusiones con compañeros.

Procedimiento:
El realizar un resumen tiene su técnica y los pasos son los siguientes:
  • lectura exploratoria del capitulo o fragmento que se estudiara.
  • Lectura pormenorizada hasta su total comprensión, sobre los párrafos fundamentales.
  • Subrayado de las ideas mas importantes.
  • Comprobación de que lo subrayados tiene su unidad y sentido.
  • A partir de lo subrayado, escribe las ideas significativas con las propias palabras del autor; procura que exista ilación en el contenido, para que el tema no pierda su significado.
Síntesis.
Es una técnica de reducción textual que debe respetar las ideas esenciales del autor original, por lo tanto, no expresa conceptos propios. El riesgo de tergiversar lo que quiso plantear el autor, agregándole comentarios, anularía nuestro trabajo.

La síntesis permite tener una idea cabal del texto como un todo y para efectuarla se debe proceder de lo simple a lo complejo, de los elementos al todo, de la causa a los efectos, del principio a las consecuencias.

Ensayo.
En la literatura es una composición escrita en prosa, generalmente breve y en el cual se expone la interpretación personal sobre un tema.

Clases de Ensayo:
  • Filosófico o Reflexivo.- Desarrolla temas éticos y morales.
  • Critico.- Enjuicia hechos e ideas; históricos, literarios, artísticos y sociológicos. Su modalidad mas conocida es el ensayo de critica literario.
  • Descriptivo.- Se utiliza para concretar temas científicos y sobre los fenómenos de la naturaleza.
  • Poético.- Desarrolla temas de fantasía, imaginación, etc.
  • Personal o Familiar.- Es el escrito que nos revela el carácter y la personalidad del autor.
Características Fundamentales.
  1. Uno de los géneros mas modernos y mas utilizados actualmente.
  2. Puede contener: reflexiones, comentarios, experiencias personales u opiniones criticas.
Estructura y organización del ensayo:
  • Debe estar organizado en párrafos.
  • Generalmente no se necesita incluir subtítulos.
  • Se desarrollan las ideas, los temas, o se contestan las preguntas asignadas por el profesor en forma seguida.
Partes de un ensayo:
  • Introducción.- Explica el tema, indica al lector el asunto a tratar. Puede explicar como se llevara a cabo la investigación y bajo que parámetros.
  • Desarrollo.- incluye las ideas del autor, temas, o contestación a preguntas suministradas por el profesor, se escribirá en un párrafo aparte.
  • Al comenzar un párrafo nuevo se debe empezar con oraciones de transición, para dar coherencia y entrelazar las ideas.
  • Conclusión.- Expresa la aportación final de escritor. Es el cierre del ensayo.
Reporte lectura.
Es una forma de comunicación escrita en el quehacer académico, resultado de un cuidadoso proceso de lectura, en este tipo de documento, el emisor maneja información concreta para un determinado receptor. Esto evita que se incluyan aspectos de inspiración personal ya que su intención es construir conocimiento, este tipo de trabajo escrito posee distintos fines prácticos: manejo de información, análisis o exposición de hechos, resumen de actividades, previsión de situaciones y solución de problemas, entre otros aspectos. Por su contenido y objetivos se pueden mencionar tres tipos de reportes: expositivo, interpretativo y demostrativo. A continuación se presentan las características de estos.

Expositivo: como su nombre indica, se exponen los hechos o situaciones en forma ordenada de acuerdo con el objetivo. Se evitan las posturas analíticas o interpretativas. Se destaca el antecedente en un resumen introductorio de interés para los receptores.

Interpretativo: En este tipo de reportes se analizan, interpretan hechos y situaciones que se manifiestan en los textos leídos. Se incluyen datos, recomendaciones y conclusiones.

Demostrativo: para elaborarlo se parte de una tesis o idea central. Es necesario establecer una distancia clara entre los hechos y sus comentarios.



Introducción: Se expone claramente el tema a desarrollar pero se recomienda escribirla cuando se haya concluido la redacción final ya que en el desarrollo se dan algunos cambios relevantes que deben incluirse en este momento del trabajo.

Cuerpo o desarrollo: se plantean las ideas de acuerdo al tipo de reporte que se redacte pero se requiere revisar los esquemas de la estructura del párrafo, se argumenta, ejemplifica y refuerza con el fin de darle un orden adecuado ala información que se maneje.



Conclusiones: se concluye asertivamente en función de lo propuesto en la introducción y lo planteado en el desarrollo.


Anexos: si el tipo de reporte de lectura lo requiere, se integran al trabajo los anexos, estos son documentos adicionales que se complementan al reporte.


Citas y referencias.
Las citas dentro del texto deberán realizarse en cursiva y con sangrado si es posible; en caso contrario deben emplearse las comillas. Las citas de referencias bibliográficas dentro del texto seguirán el siguiente modelo: (Berkes 1989: 25). Cualquier texto copiado de otro si no está entrecomillado, deberá utilizarse en forma de parafraseado (siempre citando el autor, obra, etc. como en el caso anterior).

Las referencias bibliográficas se listarán al final del documento, por orden alfabético (por el apellido, nunca según el nombre del autor), con los siguientes criterios de formato:

Artículos de revista.